dolor de ovarios

Dolor menstrual y dolor de ovarios: guía completa para entenderlo y aliviarlo

El dolor menstrual y de ovarios suele originarse por fuertes contracciones uterinas o desajustes hormonales que impactan directamente en tu bienestar diario. Identificar la causa exacta es fundamental para elegir el remedio más efectivo.

Qué es el dolor menstrual (dismenorrea) y por qué aparece

La dismenorrea es el dolor abdominal intenso que surge durante la menstruación como consecuencia de unas sustancias químicas llamadas prostaglandinas.

La presencia de prostaglandinas provoca que el útero se contraiga con mucha fuerza para expulsar el endometrio, lo que a su vez provoca una reducción temporal del flujo sanguíneo y oxígeno en el tejido muscular causando calambres fuertes. 

Dolor de regla: qué se considera normal y qué no

Experimentar molestias abdominales moderadas o cólicos durante los primeros días de la menstruación es algo normal y habitual, siempre y cuando tu rutina diaria no se vea afectada. Este dolor puede ser manejado con calor local o medicamentos y con esto, remediar la situación.

En cambio, sufrir un dolor incapacitante que no cede con medicación o que viene acompañado de vómitos, náuseas y fiebre no se considera normal y es recomendable acudir al médico y que el dolor sea tratado por un especialista.

Dolor de ovarios: qué significa realmente este término

Aunque pueda parecer que sí, los ovarios no duelen durante la regla de la manera en la que se cree. Lo que puedes sentir es un dolor reflejo irradiado desde el útero hacia los lados como consecuencia de las fuertes contracciones que genera molestia en la zona pélvica lateral. 

El dolor de ovarios, realmente se origina, no durante la menstruación, sino en la mitad del ciclo de la ovulación, momento en el que se rompe el folículo para liberar el óvulo.

Tipos de dolor menstrual y cuándo preocuparse

El dolor menstrual es diferente en función de cada persona, siendo de hasta dos tipos principales: la dismenorrea primaria, que surge por los cólicos habituales causados por las contracciones uterinas y la secundaria, originada por problemas como la endometriosis.

Por norma general, experimentar dolor en la zona abdominal es algo completamente normal, pero existen situaciones en las que sí deberías visitar a tu ginecólogo como experimentar dolor que pueda incapacitarte para trabajar o estudiar. 

Acudir a urgencias es la última de las alternativas, que es recomendable sólamente cuando sufras un dolor fuerte y repentino que venga acompañado de desmayos, fiebre alta o flujo anormal. Esto puede deberse a una infección pélvica o a la rotura de un quiste, lo que sí requiere atención médica inmediata.

Dismenorrea primaria: dolor menstrual sin enfermedad ginecológica

Es un tipo de dolor menstrual que surge como consecuencia de tener un exceso de prostaglandinas, lo que provoca contracciones fuertes para expulsar el endometrio. Es habitual y muy frecuente en la adolescencia y en jóvenes.

Dismenorrea secundaria: endometriosis, miomas y otras causas

Este tipo de dolor surge como consecuencia de alteraciones ginecológicas subyacentes como la endometriosis, miomas o adenomiosis. Suele aparecer en edades más avanzadas y el dolor suele ser más intenso, duradero y puede llegar a resistir medicamentos.

Cómo aliviar el dolor menstrual de forma inmediata

El alivio del dolor suele requerir un enfoque combinado que trate de reducir la inflamación interna y la tensión muscular externa. 

Aplicar calor en la zona baja del abdomen es una de las mejores alternativas ya que dilata los vasos sanguíneos y permite calmar la zona de manera prácticamente instantánea, pero existen otras alternativas: 

Remedios naturales para el dolor menstrual

Existen dos maneras caseras y naturales muy eficientes para calmar el dolor menstrual, entre las que se encuentran:

  • Producto Neuroclic: Periodfine es la mejor manera natural con la que solucionar este dolor intenso de regla. Contiene un mix de aceites esenciales hechos a medida para aliviar la inflamación y dolores de regla de manera rápida y con efecto casi inmediato. 

  • Aplicar calor: una bolsa de agua caliente o una manta térmica, son una de las mejores alternativas para calmar el dolor uterino, gracias a que dilata los vasos sanguíneos y mejora considerablemente el flujo de sangre por la zona.

  • Tomar jengibre: esta es una de las mejores opciones naturales, ya que, puede consumirse en polvo o infusión y contiene propiedades antiinflamatorias que reducen el dolor al poco tiempo de haberse consumido.

Medicación para el dolor de regla: pautas generales y precauciones

Los antiinflamatorios no esteroideos, como el ibuprofeno o el naproxeno, son la primera línea de tratamiento porque bloquean la producción de prostaglandinas. Para maximizar su eficacia, se recomienda iniciar la toma uno o dos días antes de la regla o en cuanto aparezca la mínima molestia.

Dolor menstrual y estilo de vida: alimentación, ejercicio y descanso

El estilo de vida que lleves puede marcar la diferencia en el nivel de inflamación general de tu cuerpo durante la menstruación. Adoptar hábitos saludables no solo mejora tu bienestar diario, sino que reduce la intensidad de los cólicos a largo plazo.

No se debe actuar únicamente cuando aparece el dolor, sino de preparar, durante un tiempo, al organismo para que se adapte a unos hábitos y rutinas saludables que preparen al cuerpo para el dolor menstrual.

Alimentación y dolor de regla: qué puede ayudar y qué conviene evitar

Una correcta alimentación es una pieza clave para preparar al cuerpo y reducir el dolor causado por la menstruación. 

Es recomendable seguir una dieta basada en Omega 3 y magnesio, que se encuentra en pescados azules, verduras y frutos secos como las nueces, ya que contienen nutrientes que regulan las prostaglandinas.

Por contra, es aconsejable reducir las cantidades de sal, azúcar y alimentos ultraprocesados. 

Ejercicio físico para reducir el dolor menstrual

Realizar actividad física es uno de los mejores remedios naturales con los que podrás reducir notablemente el dolor originado por causa de la menstruación. 

Caminar, correr, nadar u otras actividades del estilo, aumentan el riego sanguíneo en la pelvis y liberan endorfinas que sirven como analgésicos naturales para el cuerpo.

Sueño, ansiedad y cómo influyen en la percepción del dolor

Dormir entre 7 y 8 horas todos los días es fundamental para evitar subir el cortisol, una hormona que incrementa considerablemente la inflamación y disminuye tu umbral de tolerancia al dolor. 

Descansar ese número de horas previene el dolor menstrual ya que permite que el cuerpo repare tejidos y regule el sistema nervioso.

La ansiedad y el estrés crónico, son otras de las causas por las que el dolor es mucho más intenso durante la menstruación. Gestionarlo adecuadamente es necesario para sobrellevar mejor los días de regla.

Dolor de ovarios sin regla: causas más habituales

Sentir molestias en la zona pélvica fuera de los días de regla es relativamente frecuente y normal, respondiendo a procesos fisiológicos naturales del propio cuerpo o simplemente podría asociarse a problemas intestinales. 

Dolor de ovarios en el síndrome premenstrual y la ovulación

Durante la ovulación, concretamente durante la mitad del ciclo, se rompe el folículo que contiene el óvulo liberado. Esto puede provocar un dolor agudo completamente normal que suele durar desde unos minutos hasta unas horas, desapareciendo sin tratamiento. 

En cambio, el Síndrome Premenstrual, en cambio, provoca una inflamación pélvica generalizada los días antes de llegar el periodo debido a la retención de líquidos y cambios hormonales. 

Dolor pélvico persistente: cuándo pensar en otras patologías ginecológicas

Si el dolor es constante y no guarda relación con el ciclo, podría indicar la presencia de quistes ováricos que son sacos llenos de líquido que no se han reabsorbido correctamente o de una infección bacteriana como la Enfermedad Inflamatoria Pélvica que requieren el tratamiento por parte de un especialista.

Otra de las causas de un dolor pélvico persistente es la endometriosis, que también puede aparecer fuera de la menstruación, especialmente si hay adherencias o tejido endometrial afectando a los ovarios. 

Pruebas y diagnósticos más frecuentes que puede solicitar el ginecólogo

Una de las maneras más precisas con las que el ginecólogo puede evaluar tu situación, es mediante una ecografía transvaginal, ya que, permite visualizar la estructura de los ovarios y el útero con alta precisión. 

Otra alternativa podría ser una resonancia magnética para casos en los que el dolor persiste. 

Cuándo pedir ayuda profesional y cómo hablar de tu dolor menstrual

Buscar apoyo médico es una de las mejores soluciones para dejar de sufrir cada mes de manera innecesaria: 

Cómo explicar tus síntomas al ginecólogo para un buen diagnóstico

Es muy útil llevar a la consulta un calendario menstrual o diario de los síntomas más recientes anotando la intensidad del dolor y la zona en la que se experimenta. 

Específica al ginecólogo, los medicamentos que hayas ingerido, la efectividad que han tenido y los efectos secundarios que hayas podido experimentar.

Una vez hayas aportado esa información, el ginecólogo tendrá mucha mayor facilidad para guiarte y asesorarte sobre qué es lo mejor para reducir el dolor menstrual.

Impacto del dolor de regla en el trabajo, estudios y vida diaria

El dolor menstrual severo es una de las principales causas de absentismo escolar y laboral en mujeres jóvenes. A menudo, el malestar afecta directamente a la concentración y la productividad, convirtiendo la jornada diaria en un verdadero reto de resistencia física y mental.

Más allá del ámbito profesional, la dismenorrea puede limitarte socialmente, obligándote a cancelar planes o evitar actividades físicas. Reconocer que el dolor está interfiriendo en tu calidad de vida es el primer indicador de que necesitas un abordaje médico diferente al actual.

Preguntas frecuentes sobre el dolor menstrual y de ovarios

¿Es normal tener un dolor de regla tan intenso cada mes?

No, sufrir un dolor que te paraliza o te impide realizar tus actividades cotidianas no debe considerarse normal. Si bien una molestia leve o moderada es habitual, el dolor incapacitante suele indicar desajustes hormonales o patologías subyacentes como la endometriosis.

¿El dolor menstrual puede provocar mareos, vómitos o diarrea?

Sí, es posible debido a que las prostaglandinas, las sustancias químicas que causan las contracciones del útero, pueden pasar al torrente sanguíneo y afectar a otros órganos. Cuando actúan sobre el intestino, aumentan su movimiento provocando diarrea, y en el estómago pueden causar náuseas y vómitos.

¿Puedo hacer deporte si tengo mucho dolor de ovarios o calambres menstruales?

Depende de tu nivel de energía, pero el ejercicio suave suele ser muy beneficioso porque libera endorfinas, que actúan como analgésicos naturales. Actividades de bajo impacto como caminar, nadar suavemente o hacer yoga ayudan a reducir la congestión pélvica y aliviar los calambres.

¿Qué puedo hacer si los analgésicos no alivian mi dolor menstrual?

Si la medicación habitual no surte efecto, prueba a combinarla con calor local continuo y empieza la toma de antiinflamatorios 24 horas antes de que baje la regla, pero nunca excedas la dosis recomendada. A veces, cambiar el tipo de fármaco bajo supervisión médica puede marcar la diferencia.