Dormir bien es uno de los pilares fundamentales de la salud. Sin embargo, cada vez más personas tienen dificultades para conciliar el sueño, mantenerlo o levantarse con sensación de descanso. La buena noticia es que, en muchos casos, la causa no es un trastorno grave, sino hábitos poco saludables que sabotean tu descanso.
A continuación te contamos 3 de los más comunes y cómo corregirlos para regalarte una buena noche.
3 hábitos que empeoran tu sueño (y cómo corregirlos)
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Usar el móvil en la cama. La luz azul de las pantallas inhibe la producción de melatonina, la hormona que regula el ciclo del sueño. Resultado: tardas más en dormirte y tu descanso pierde calidad.
Solución: apaga pantallas al menos 30 minutos antes de acostarte y sustituye el móvil por un libro, música suave o una meditación guiada.
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Cenar demasiado tarde o alimentos pesados. Una cena copiosa obliga a tu cuerpo a seguir digiriendo cuando debería estar descansando, lo que puede provocar despertares nocturnos, acidez o sensación de pesadez.
Solución: cena ligero y, si es posible, al menos dos horas antes de ir a la cama. Elige alimentos fáciles de digerir, como verduras, pescado o infusiones relajantes.
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No tener una rutina de desconexión. Ir a la cama directamente desde una actividad intensa (trabajo, redes sociales, televisión) hace que tu mente llegue acelerada y le cueste más entrar en “modo descanso”.
Solución: crea un ritual nocturno que indique a tu cerebro que ha llegado el momento de relajarse: baja las luces, respira profundo, escribe en un diario o prepara la habitación con un ambiente tranquilo.
El aliado natural para tu rutina de noche
Dormir mejor no significa recurrir siempre a pastillas. A menudo, el descanso se construye con pequeños hábitos y apoyos naturales. En Neuroclic hemos creado dormifine, un inhalador con aceites esenciales como lavanda, mandarina y mejorana, diseñado para:
- Facilitar la conciliación del sueño.
- Relajar cuerpo y mente antes de acostarte.
- Mejorar la calidad del descanso nocturno.
Un gesto tan sencillo como tres inhalaciones antes de dormir puede ayudarte a transformar tus noches en un verdadero descanso reparador.
Regálate una buena noche
Los detalles cotidianos son la clave de un descanso reparador. Desconecta de las pantallas, cena ligero, crea tu ritual nocturno y apóyate en soluciones naturales para que cada noche sea el regalo que tu cuerpo necesita. Duerme mejor, despierta renovado.
